domingo, 30 de agosto de 2015

Por las aceras

Es importante, es necesario y es deber del Ayuntamiento mantener en buen estado las aceras de las calles de Salamanca. A veces los parches no son suficientes y la solución pasa por reconstruir la acera: nivelarla, recuperar bordillos, etc. Incluso hoy en día estas operaciones urbanísticas se aprovechan para reordenar el tráfico e impedir las muchas libertades que se toman algunos conductores. También, para intentar hacer más amables y seguras nuestras calles, con más árboles o aceras más anchas.

El caso es que este verano Salamanca ha tenido un alto nivel de actividad en esta cuestión, pero sólo es coincidencia, precisamente lo que han criticado conductores, partidos de la oposición, etc. En resumen: mala planificación.

Que se sepa no ha sido para tanto pero si es verdad que las cosas se han podido hacer mejor. Por ejemplo, ¿para qué mantener vallas que limitan espacio de trabajo (a mayores del espacio sobre el que se trabaja) durante los fines de semana?.

El tiempo dirá si la inversión ha merecido la pena. Por lo pronto es bueno que se invierta más en las aceras, que están todas muy olvidadas, a diferencia de las calzadas. Pero crear nuevos aparcamientos en batería, no aprovechar para ensanchar aceras, ni para mejorar el itinerario del peatón, revisar paradas de autobús y mobiliario urbano, están entre las carencias de estas intervenciones que se hacen más para dejar la huella personal que por la verdadera intención de hacer de Salamanca una ciudad mejor. Sólo hay que ver que las aceras remodeladas pertenecen a grandes calles, olvidando todas aquellas otras que pueden ser tanto o más transitadas y pueden encontrarse en tanto o peor estado.

A ello debemos añadir una nueva operación de rebaje de bordillos. Cuando ya nos habíamos creído que estaban todos rebajados, si nos atenemos a las notas triunfalistas del Gabinete de Prensa del Excelentísimo.

martes, 25 de agosto de 2015

La Europa siniestra

Esteban Ibarra, referente de la movilización solidaria y pacifista frente a las manifestaciones de intolerancia en España, es el autor de "La Europa siniestra": un libro que nos acerca a una Europa ajena a los valores de dignidad, libertad, igualdad y justicia.

Se trata de esa otra Europa que niega el Holocausto, grita "que se vayan a su país", rechaza dar atención sanitaria a una mujer andina, no contrata a un hombre por ser negro, agrede a una joven de determinada ideología política e incluso mata y comete crímenes de odio. El libro habla, por tanto, de una Europa que está en la calle y en las instituciones y se presenta como "una modesta contribución que alimenta la conciencia colectiva, un aviso de lo que acecha a nuestro continente desmemoriado".

jueves, 20 de agosto de 2015

La vida en llamas

Desde el próximo 4 de septiembre se proyectará en diferentes cines de España "La vida en llamas", un documental de Manuel H. Martín que homenajea a los bomberos de la BRICA, el cuerpo de élite que se enfrenta a los incendios en primera línea, arriesgando sus vidas.
Sólo desde 2000 han fallecido 69 personas en España mientras participaban en labores de extinción.
El documental se ha rodado durante dos años y recoge las experiencias de una de las unidades de élite y su lucha anónima y arriesgada contra el fuego.

En lo que llevamos de 2015 se han quemado más hectáreas que en los años 2013 y 2014 juntos. Pese a ello sigue siendo escasa la valoración hacia el trabajo indispensable de estos héroes.

lunes, 10 de agosto de 2015

Abajo los restaurantes

"Abajo los restaurantes" se presenta como "una crítica obrera del sector de la hostelería" por alguien que ha trabajado en dicho sector.

En este libro se relata una experiencia muy cercana, quién más quién menos ha tenido alguna experiencia en este ámbito laboral, pero también se erige como "una crítica global y radical del capitalismo" y su proceso de producción en beneficio del empresario. Pero eso no es todo, las relaciones laborales también contribuyen a la formación de la clase obrera.

La lucha de los trabajadores de los restaurantes solo tiene sentido si se transforma en una lucha por un mundo sin trabajadores ni restaurantes.

miércoles, 5 de agosto de 2015

De sentido común

El documental "De sentido Común" trata de probar cómo expresiones acuñadas por economistas han sido adoptadas por los ciudadanos gracias a la insistencia de los medios de comunicación de masas, recoge entrevistas a economistas con distintos puntos de vista sobre las medidas adoptadas en Europa para hacer frente a la crisis económica y analiza "los elementos que configuran el prisma con el que interpretamos la realidad y con el que se conforma el sentido común de una sociedad acuciada por la crisis económica y la pérdida de derechos sociales".

Este largometraje es el resultado del trabajo de varios estudiantes de Economía, promovido por el colectivo EconoNuestra y la Asociación Universitaria 'Economía Alternativa' de la Complutense.